22 marzo, 2006

Olvídalo

Una mujer en Washington, Estados Unidos, no puede olvidar. Tiene 40 años, y recuerda con precisión la mayoría de ellos. Tras dársele una fecha, ella puede remontarse a la misma con profundidad, recordando qué día de la semana cayó, que hizo, cómo estaba el tiempo y qué cosas importantes sucedieron ese día. Las imágenes se le suceden en su cabeza como en una película, que nunca se detiene. Sin duda que puede ser muy molesto, pues la mujer dice que no siempre mantiene el control sobre sus recuerdos. Pero también dice que si pudiera escoger, preferiría quedarse con ellos.

Bendición o maldición? Personalmente, teniendo lo que típicamente se conoce como una mala memoria, sé que en incontables ocasiones he deseado recordar más y mejor (aunque ya he olvidado muchas de ellas). Lo de "típica" mala memoria va porque soy malo para recordar eventos, citas y a veces incluso lo que estoy haciendo en un momento dado. Sin embargo puedo recordar otras cosas con gran precisión cómo canciones, olores y variados detalles sin sentido. Bueno, decía que yo he deseado varias veces tener una mejor memoria. Pero enfrentado al extremo de recordarlo todo, de no poder olvidar, prefiero quedarme como estoy. El olvidar es una cualidad tremendamente importante. Antes que nada para con nosotros mismos, olvidar es escencial. Nos permite soportárnos, a pesar de nuestros defectos y las infinitas estupideces que hemos cometido (y seguiremos cometiendo) en nuestras vidas. Porque seguro, uno aprende de los errores, pero luego olvida el error y el aprendizaje queda! Imagínense la moral (y verguenza) con la que todos andaríamos si recordáramos todos nuestros errores. En vez de eso, lo que queda es crecimiento personal, conocimiento sobre cómo manejar una situación más, una mejor persona. Gracias a que es posible hechar al olvido lo que en primer lugar nos hizo tomar conciencia. Suena irresponsable? Pues si. Pero si acaso tuvieran reproches sobre ese hecho (porque les guste o no, sucede que es así), existen otras razones para atesorar el olvido. El olvido es el lubricante social que permite seguir adelante día a día inserto en una sociedad. El olvido te permite volver a vivir experiencias que ya haz vivido - como si fuera la primera vez! El olvido te permite siempre darte una posibilidad. El olvido te ayuda a sorprenderte más seguido. El olvido te ayuda a volver a reflexionar sobre lo mismo.

Para los que preguntan por mi: comenzaron las clases, y las obligaciones no se dejaron esperar. Tengo diversión asegurada hasta la primera semana de abril.

Bonus track: Feña me comentó sobre Pandora, un lugar para conocer grupos de música. Funciona así: escribes el nombre de un grupo que te guste, y el sitio armará un programa musical con grupos que tengan una clasificación similar al que ingresaste. A medida que suenan las canciones le puedes ir enseñando al sistema que tipo de canciones tocar y cuáles no, y así ir creando tu propia radio que luego puedes compartir por mail. Está muy bueno.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jojo me siento honrado!!! he sido mencionado en el sitio!! hehehe

ya cabro cuidate saludos a la Fran, aver cuando nos juntamos por unas chelas y un completo.

p.D. Tengo ganas de karaoookeeee

Anónimo dijo...

Oh my god q escribes lindo!!!
Me encanta como piensas, y te encuentro toda la razón con respecto a olvidar y recordar... Es buenísimo además cuando tú no te acuerdas de algo pero la otra persona sí, entonces lo puedes escuchar y vivir como toda una "novedad" (por decirlo de alguna manera), lo cual ya nos ha pasado más de una vez no?
Te amo mucho pastel! y eso no lo olvides! :P